El pasado sábado día 27 de enero, la plantilla de Bimbo, conjuntamente con familiares y vecinos de El Verger, se manifestó recorriendo la distancia que separa la factoría del Ayuntamiento, terminando el comité de empresa reclamando desde su balcón el mantenimiento de la factoría y exigiendo sentido común a la multinacional.

Miembros del área de Movimiento Obrero del PCPV, conjuntamente con camaradas de Les Marines, se trasladaron hasta la localidad para mostrar su apoyo a las trabajadoras y acompañarles en todo el recorrido de la mano de la Federación de Industría de CCOO-PV.
Allí pudieron departir con trabajadoras y trabajadores, además de miembros del comité de empresa de la factoría, entre ellos su presidente, José González, el cual nos mostraba su preocupación por el futuro de la plantilla. Una plantilla que vertebra el tejido industrial de la comarca, además de ser mayoritariamente empleo femenino y de calidad, cabe remarcar que más del 60% de la plantilla está ocupado por mujeres.

El cierre es la consecuencia de la falta de inversión deliberada para justificar el traslado de una factoría que es perfectamente viable, dejando en la calle a más de 100 familias sin alternativa alguna. Los ofrecimientos de la empresa para recolocarles en su factoría de Barcelona es un insulto para los trabajadores y trabajadoras. Además, las indeminzaciones totalmente ridículas hacen del conflicto la única vía digna para salvaguardar sus empleos y, con ellos, sus vidas y arraigo. Una factoría, que cabe recordar se encuentra entre dos puertos punteros a nivel estatal, a medio camino de Alicante y València, además de estar estratégicamente al lado del corredor mediterráneo. 

Mientras hace unos días escuchábamos durante su visita a FITUR al president Mazón fanfarronear alegremente de que próximamente se desplazará a Catalunya para atraer empresas hacia el País Valencià, “porqué somos una comunitat amable”, cuando lo que debería hacer es estar dando la cara por las y los trabajadores de Bimbo, contra este plan de deslocalización industrial hacia Barcelona precisamente. Esta misma semana se hacía público que la multinacional ya ha puesto en venta la factoría.

Por lo tanto, desde el Partit Comunista del País Valencià - PCPV, exigimos responsabilidad al Gobierno, tanto autonómico como central, para dar la cara por un estandarte histórico industrial de La Marina Alta, para defender a la clase obrera de los ataques de la patronal. A su vez, animamos a la plantilla a elevar el conflicto y a implicar a la comarca para demostrarle a Bimbo que nada puede contra un pueblo unido y combativo. Como ya venimos manifestando semanas atrás, el Partit Comunista del País Valencià se pone a disposición de las trabajadoras y los trabajadores, así como de los sindicatos miembros del comité de empresa para exigir una solución justa.

¡No al cierre de Bimbo, ni un paso atrás!